El Sevilla comenzó resuelto y pisando área del Málaga con frecuencia. Tuvo ocasiones clarísimas, pero le faltó el acierto, que tampoco tuvo el Málaga en los últimos 20 minutos, jugando con uno más por la expulsión de N´Zonzi
No hay mejor dicho en el fútbol para definir lo que ha sido el partido del Sevilla FC esta noche en La Rosaleda del que cuando no se puede ganar lo mejor es no perder. De perogrullo, pero más que fundamentado en un choque que tuvo momentos para ambos equipos, pero que se puso muy feo en su tramo final, cuando N´Zonzi se fue a la calle por doble amarilla y el Sevilla tuvo que resistir con uno menos. El Málaga sólo entonces se mostró superior y buscó con empeño el tanto de la victoria, pero los hombres de Unai resistieron con entereza el asedio y pudieron salvar un punto que tal vez por las ocasiones que se desperdiciaron en la primera parte pueda saber a poco, pero que indiscutiblemente hay que poner en valor tal y como se puso la cosa.
Se esperaba, o mejor dicho se demandaba, un Sevilla con protagonismo desde el principio. Y la realidad es que el Sevilla salió bien, enfilando con mucha clarividencia la portería contraria, con transiciones rápidas y verdadero peligro. En realidad, en la primera media hora de juego ambos equipos mostraron desparpajo y un juego alegre, que se fue perdiendo con la aparición del cansancio. Beto tuvo varias intervenciones de mérito, pero las mejores ocasiones fueron para los de Nervión. Gameiro tuvo hasta tres claras, pero en ninguna estuvo acertado. Primero, desperdiciando un rechace a tiro de Banega con Kameni en el suelo, después con un pase de Reyes que envío fuera en el área chica y finalmente en un mano a mano que mandó a las nubes, otra vez asistido por Reyes.
Con esa sensacion de que el Sevilla podía haberse llevado más, el choque llegó al descanso, con el Málaga más intenso en los instantes finales. Pero en la reanudación de nuevo el Sevilla salió enseñando los dientes y generando peligro por banda y a balón parado. La más clara la tuvo Vitolo, que tras una gran jugada con Coke, le faltó ajusticiar con contundencia a Kameni. Pero el Málaga no se arrugaba y daba la réplica, entrando el partido en su fase final en una cierta incertidumbre que se acrecentaba por el hecho de que las fuerzas iban decayendo y todo se volvía más espeso. Unai comenzó a mover el banquillo, sacando primero a Konoplyanka por Reyes, pero todos sus planes saltaron por los aires cuando a 22 del final N´Zonzi se fue a la calle por doble amarilla.
En inferioridad numérica, ya con Mariano e Inmobile en el campo, el Sevilla prácticamente renunció al ataque y optó por amarrar el punto. No fue fácil, porque el Málaga se lanzó de lleno a por el partido y por momentos puso cerco al área de Beto. Sin embargo, el Sevilla sacó su cara más sacrificada, sabiendo sufrir con uno menos, circunstancia que no es baladí nunca, pero mucho menos a estas alturas de temporada cuando nadie está al cien por cien. Por eso el punto finalmente logrado tiene su valor, porque el choque se puso con muy mala pinta y el equipo dio la cara en las duras. En el debe, lo mucho que se desperdició en la primera parte, donde estuvo en realidad el triunfo. Pero las ocasiones estuvieron, que es lo importante, y la pelota ya entrará, eso seguro. Seguir a @Aleive7 Seguir a @futdelsalvador
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